Al parecer el futbolista se molestó porque el club no aceptó la oferta de Atlético Mineiro y se lo hizo saber al Consejo de Fútbol.

Lo cierto es que Sebastian Villa se comunicó con el entrenador, Miguel Ángel Russo, y con el Consejo de Fútbol para saber por qué se había frustrado la oferta del club brasilero. Al parecer Boca lo quiere negociar y decidieron que no juegue, a Mineiro le dijeron que es un jugador “muy importante para el equipo”, algo que parece contradecir esa postura.

Es por esto que el colombiano puso firme su postura y avisó que quiere que se arregle su salida cuanto antes, sobre todo después de ver que Emanuel Reynoso fue vendido al Minnesota United de la MLS prácticamente por el mismo monto (cinco millones de dólares), aunque en este último caso fue por el 100 por ciento de su ficha.

 La relación entre Boca y Villa parece estar totalmente rota y sólo será cuestión de tiempo hasta que las partes se pongan de acuerdo y el jugador encuentre un nuevo destino.