En el marco de la pandemia que afecta al país, y las medidas que se adoptan por la emergencia sanitaria, la necesidad de transportar mercadería y alimentos entre provincias y distritos municipales, se convirtió en una de las tareas que merece mayor atención de las autoridades.

La labor de los transportistas no puede interrumpirse para asegurar el abastecimiento de la población, pero al mismo tiempo se deben extremar medidas para la protección de los propios trabajadores, y también de las comunidades que recorre, ya que constantemente viajan entre capitales, y desde grandes centros urbanos hasta otras localidades más pequeñas.

Autoridades de distintas provincias interactúan en forma permanente para interiorizarse sobre los métodos más efectivos de control y seguimiento, y en esos encuentros virtuales se destacó a nivel nacional el trabajo desplegado por la Municipalidad de la Capital en el Mercado de Abasto.

El sistema implementado aquí es utilizado como modelo en distintos puntos del país, a partir de los excelentes resultados que está ofreciendo, al margen de que ningún lugar está exento de detectar un caso positivo.

En Capital, para desarrollar el control del Abasto sin afectar su normal funcionamiento, se desplegó el trabajo conjunto de diferentes áreas, lo cual implica un importante despliegue.

José Malki, experto en Higiene y Seguridad Laboral que está al frente de las tareas, detalló al respecto que “el Mercado de Abasto capitalino fue pionero en la implementación de un estricto protocolo de control, que incluye el paso obligatorio por el arco sanitizante, el registro de todos los datos de los conductores para el sistema de trazabilidad, y la desinfección del vehículo”.

Al llegar, “los transportistas completan una declaración jurada sobre su procedencia y luego el COE procede a realizarles el correspondiente hisopado”, añadió.

“Más aún, en el caso de choferes que viajen hacia otros destinos y lleguen al Mercado de Abasto para dejar mercadería, hay otro protocolo. En ese caso se toman los datos, se descarga el camión y el conductor ni siquiera se baja del vehículo. Si el transportista necesita bajarse, por ejemplo para utilizar los sanitarios, es acompañado por un policía o bombero voluntario a un sector que sólo utilizan los choferes de paso”, explicó Malki.