El crecimiento del PIB chino superó las previsiones y se mantuvo estable en 5,4% en el primer trimestre del corriente año, a pesar de una demanda tibia y un guerra comercial con Estados Unidos, de acuerdo con estadísticas divulgadas el miércoles.

La segunda mayor economía del mundo se expandió 6,4% en el período de enero de marzo, un desempeño levemente superior al 6,3% que había sido previsto por economistas y analistas consultados por la AFP.

El desempeño de la economía de China, divulgado por la Oficina Nacional de Estadísticas, fue el mismo del último trimestre de 2018.

Este ritmo se sitúa muy por encima de aquello que la mayoría de los países apenas se permiten soñar, y muestra que la economía de China se ha estabilizado después de haber experimentado desaceleración en cada trimestre de 2018.

“La economía nacional disfrutó de un desempeño estable con crecientes factores positivos y reforzadas expectativas y confianza de mercado”, apuntó la Oficina en un comunicado oficial.

El primer ministro Li Keqiang había adelantado en marzo que el objetivo chino para el crecimiento de este año se situaba entre 6,0% y 6,5%.

En consonancia con la tendencia del primer trimestre de este año, el desempleo cayó de 5,3% en febrero a 5,2% en marzo.

China se ve forzada a un delicado equilibrio ya que trata de apoyar los negocios privados que necesitan de créditos pero sin aumentar su deuda.

Otro lastre importante para la economía china, la guerra comercial con Estados Unidos, parece estar encaminada a resolverse, después de nueve meses de conversaciones de muy alto nivel.

Washington y China se aplicaron mutuamente aranceles que ascienden a nada menos que 360.000 millones de dólares, en un escenario que provocó heridas de los dos lados y puso en alerta a la economía global.

Sin embargo, por el momento no se ha definido una fecha para que el estadounidense Donald Trump y el chino Xi Jinping se sienten a la mes a firmar un acuerdo que ponga fin a esa guerra comercial.

(Con información de AFP)