En una sesión que termino pasada la medianoche, el Senado de la Nación  dio media sanción a la Reforma Judicial Penal sin el aval de los miembros de la oposición.

 El proyecto de Reforma Judicial busca reordenar la justicia penal federal y crear  juzgados y cámaras de apelaciones en las provincias, donde el oficialismo decidió eliminar la alusión a los medios de comunicación del artículo en el que se obliga a los jueces a denunciar presiones.

La iniciativa del Ejecutivo Nacional  fue aprobada por 40 votos afirmativos del Frente de Todos y sus aliados,  contra 26 votos negativos de la bancada opositora de Juntos por el Cambio, que mantuvo sus cuestionamientos, pese al cambio introducido a último momento, por considerar que la reforma “no era prioritaria” en medio de la pandemia de coronavirus.

En el final de la sesión, el oficialismo a través de la senadora Anabel Fernández Sagasti, denunció amenazas a través de la red social Twitter contra la vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner por promover la reforma judicial e intimidaciones contra los senadores que apoyaron el proyecto aprobado.

La iniciativa, que ahora deberá ser tratada por la Cámara de Diputados, crea un nuevo fuero penal federal y más juzgados, fiscalías y cámaras de apelaciones en siete provincias con la meta puesta en fortalecer el sistema de justicia, y desde el oficialismo se afirmó que se trata del “puntapié inicial” de una reforma que “debe ser más amplia”.