Solo en combustible gastan en promedio por día y por unidad entre $3.961 y $5.941 para circular en el Valle Central.

Con la quita total del subsidio nacional al servicio de transporte de pasajeros y la imposibilidad de absorber a nivel local la carga, las empresas advirtieron que sin ayuda oficial es imposible mantener la prestación.

A partir del 1 de enero, todas las empresas de transporte del país dejarán de recibir el subsidio para la compra de gasoil y el paliativo alcanzará en Catamarca apenas al 5% de los $40 millones que recibieron hasta este año. De ahora en más el compromiso para mantener el servicio en funcionamiento deberá ser enfrentado por las provincias y, en el peor de los casos, por el usuario.
Para el sector empresarial, a la quita del subsidio se suman los altos costos para mantener el servicio, no solo con los insumos diarios, sino con otros que en lo que va del año ya arrastran aumentos de más del 100%. Según indicaron, solo en gasoil el costo es millonario.
Cada unidad gasta en promedio en forma diaria entre 90 y 100 litros de gasoil para hacer su recorrido. Con lo que por unidad cada empresa que circula en la Capital gasta en promedio entre $3.564 y $3.961 diarios.
Otras con un recorrido más extenso, como por ejemplo a Pirquitas, llegan a gastar 150 litros de combustible, es decir unos $5.941, teniendo  en cuenta que el litro cuesta $39,61.

Las empresas locales ya venían costeando parte de los subsidios ya que Nación solo pagaba entre el 60 y 70% del total de combustible en forma mensual. “A nosotros nos subsidiaba solo 19.000 litros de los 30.000 que utiliza la empresa por mes, el resto lo pagábamos a precio surtidor”, aseguró Franco Pizano, de la cooperativa La Rubí.

Pero, según indicó, el combustible es solo parte de insumos que demanda el servicio. Los neumáticos, que hasta marzo de este año costaban $6.000, hoy cuestan $13.000, es decir casi un 120% más.

Los repuestos, -la mayor parte de ellos cotizados a dólar- hacen prácticamente insostenible que se pueda mantener la actividad bajo una inversión privada. Una unidad 0 kilómetro puede llegar a costar $4.000.000.

Pizano ejemplificó la relación costo – pasaje, cuando aún no estaba en vigencia el subsidio nacional, y tomó como referencia el año 1998, cuando el litro de gasoil valía $0,23, y el boleto $0,70. “Con un pasajero que subía se pagaban 3 litros de combustibles. Ahora, si llegamos a trabajar como en el año 98 y si un boleto mínimo tendría que costar lo que cuestan 3 litros de combustible, sería imposible”, dijo, descartando la posibilidad de que sea el usuario el que tenga que absorber la baja subsidiaria.

El panorama es
de incertidumbre
Pizano señaló que hay mucha incertidumbre en las empresas, que se mantienen a la espera de que la Dirección de Transporte convoque a una reunión para definir la situación. Sin embargo, estimó que es inevitable que el precio del boleto aumente. “Creo que es inevitable la suba del precio del boleto, porque es mucho. Nos sacan todos los subsidios. La Provincia puede absorber parte, pero no creo que esté en condiciones de hacerse cargo de todo”, dijo en coincidencia con las declaraciones del titular de Transporte de la Provincia, Guillermo Matterson.

El funcionario había señalado que la Provincia firmó un fondo compensador por $1,5 millones, mientras que indicó que se trabaja en definir cuál será el aporte oficial y admitió que hay riesgo de que el servicio pierda la rentabilidad.
La mayor parte de las empresas ya redujo un promedio del 20% la prestación por los altos costos, la incertidumbre y para ahorrar en temporada baja.

Otras ya tuvieron problemas para cumplir con los pagos. En el caso de EL NENE, sigue con retraso de pagos y se conoció que aún se adeuda parte del aguinaldo.

Fuente: El Ancasti