Se profundiza la crisis en el sur de Siria. Las muertes incluyen ejecuciones colectivas, ataques armados y víctimas civiles. Israel mantiene contactos con líderes drusos.
Al menos 47 personas murieron el jueves en el marco de los enfrentamientos en la provincia de Sweida, al sur de Siria, entre facciones drusas, milicias beduinas y fuerzas del Ministerio de Defensa y Seguridad del país, en una escalada del conflicto que atraviesa su duodécimo día y ha dejado más de 1.300 muertos desde su inicio.
Una gran parte de las víctimas del jueves corresponden a la presunta ejecución de hasta 42 civiles, entre ellos mujeres y niños, atribuidas por el Observatorio Sirio de Derechos Humanos (OSDH) a fuerzas de seguridad del Gobierno de transición sirio y milicianos beduinos.
La organización, con sede en la ciudad de Londres y una red de informantes en el país, denunció que las ejecuciones ocurrieron en el contexto de los intensos enfrentamientos registrados en localidades rurales de Sweida.
Además, el OSDH informó que cinco miembros de las fuerzas de seguridad sirias y de milicias beduinas murieron en un ataque perpetrado por facciones drusas locales en un campo situado en la misma provincia.
En paralelo, las autoridades de Damasco llevaron a cabo una nueva evacuación de familias beduinas de la región, con la salida de 250 personas en un convoy que las trasladó a refugios en la gobernación de Dará, en lo que representa la cuarta operación de este tipo en el marco del conflicto.
Documented video of the moment the so-called #Syrian army (extremists) committed a massacre against an American citizen Hosam Saraya and his family in Sweida, southern Syria. The massacre was committed for sectarian reasons.Just because he is from the Druze sect pic.twitter.com/7fuIei3CjJ
— Jamal Balî (@Jamal_Bali7) July 22, 2025