En las últimas horas, el Presidente y la vice estuvieron a solas en la quinta presidencial para diseñar una nueva estrategia para intentar revertir los últimos  números de las PASO.

Cristina Kirchner y Alberto Fernández se reunieron durante más de tres horas en Olivos para analizar las PASO y diseñar una nueva estrategia para intentar revertir los resultados de las adversas elecciones. Estuvieron anoche en la residencia presidencial, a solas, y estaba previsto otro encuentro en los próximos días para terminar de definir los tiempos del cambio de Gabinete, entre otras modificaciones en el Gobierno.

En el contexto de incertidumbre, diálogos por lo bajo y mensajes en público de los últimos días, en el Frente de Todos esperan que las disputas internas que derivaron del traspié electoral se resuelvan en los próximos días y creen que solo habrá definiciones concretas una vez que Alberto Fernández y Cristina Kirchner se pongan de acuerdo. Después del primer diálogo, por ahora había hermetismo, tanto en el Senado como en la quinta de Olivos sobre el resultado final. En general, los cónclaves entre el jefe de Estado y la vice se producen sin aviso, sin fotos, y trascienden a posteriori. Esta vez no fue la excepción.

El encuentro, informaron altas fuentes oficiales al diario nacional  Infobae, se produjo en el chalet de la quinta oficial entre las 18.30 y las 22. El Presidente y la vice estuvieron a solas y el contenido de la reunión se mantenía en reserva. Es el primer paso que esperaban las distintas tribus para empezar a ordenar la interna en la coalición oficialista, a menos de dos meses de las elecciones de noviembre. Sin embargo, desde el entorno de Cristina Kirchner negaban esta mañana que la reunión haya existido.

En los distintos espacios consideran necesarios los cambios, pero hay diferencias sobre los detalles del nuevo rumbo, los tiempos de la implementación, la profundidad, y los funcionarios sobre los que impactarán. El ministro de Economía, Martín Guzmán, es el funcionario más cuestionado: en gran parte se atribuye la derrota al manejo de su cartera.

La renuncia de los miembros de los gabinetes de Alicia Kirchner en Santa Cruz, que se conoció el lunes a la noche; y de Axel Kicillof en la provincia de Buenos Aires, que confirmó hoy la ministra de Gobierno, María Teresa García, son un indicio del planteo de Cristina Kirchner. Como fue manifestado por las voces de distintos referentes del kirchnerismo en los últimos días, la postura del Instituto Patria es que la reorientación en el Gobierno y el reemplazo de ciertas figuras deberían realizarse de la manera más expeditiva posible. El principal apuntado es el ministro de Economía, Martín Guzmán.