A cuatro meses de las primarias y seis de las elecciones generales, un magistrado incómodo para la Casa Rosada lidera la terna de jueces seleccionados para ocupar el decisivo Juzgado Federal de La Plata, con competencia electoral en toda la Provincia de Buenos Aires, aprobada hoy por el Consejo de la Magistratura. Alejo Ramos Padilla, quien tiene a cargo la investigación de presunto espionaje ilegal que involucra, entre otros, al falso abogado Marcelo D’Alessio, quedó primero por puntaje en el orden de mérito para cubrir el Tribunal que controla las elecciones en el principal distrito del país en número de electores.
En segundo lugar quedó ubicado Jorge Eduardo Di Lorenzo, secretario del Juzgado Federal Nº 3 de La Plata, y en tercero Laureano Durán, secretario de la Cámara Penal de esa ciudad, quien ya subrogó el Tribunal Electoral en 2015.
Ambos candidatos tuvieron un buen desempeño en temas electorales durante la entrevista personal, una temática en la que Ramos Padilla habría estado “más flojo” en sus respuestas, según varios consejeros que estuvieron presentes.
La decisión ahora es del presidente Mauricio Macri, que puede elegir a cualquiera de los tres. Los tres postulantes se presentaron hoy a la audiencia pública frente al plenario, en la que los consejeros tenían la posibilidad de consultarlos sobre aspectos no vinculados a lo específico de la competencia del Juzgado a cubrir.
No hubo preguntas sin embargo, y el único que optó por hacer un comentario fue Ramos Padilla. El magistrado de Dolores mencionó que el 2 de abril recibió un reconocimiento de los ex combatientes de La Plata por su trabajo en la identificación de los soldados argentinos enterrados en el cementerio de Darwin en Malvinas.
La terna aprobada hoy por mayoría –solo se abstuvo Ricardo Recondo-, será ahora elevada al Poder Ejecutivo, que es el que debe elegir su candidato para su pliego sea aprobado en el Senado. Este trámite requiere contar con el voto de la mayoría del peronismo, pero por los tiempos políticos y por ser justamente un año electoral, es poco probable que quien termine ocupando el Juzgado Federal de La Plata lo haga antes de las elecciones de octubre.
Este Tribunal tiene una importancia estratégica, porque al tener competencia electoral es el que aprueba las inscripciones de los partidos y alianzas partidarias en la Provincia, resuelve los reclamos vinculados a las candidaturas, controla el resultado electoral y recibe las denuncias por irregularidades durante las elecciones.
Mérito vs. antecendentes
Pese a sus méritos académicos y su desempeño como juez federal desde 2011, todos dan ya por hecho que es prácticamente imposible que Ramos Padilla acceda al Juzgado Federal Nº 1 de La Plata, vacante desde la muerte de Manuel Blanco en 2014.
Consultado al salir de la audiencia pública, el magistrado reconoció que tenía expectativas por acceder al cargo, aunque se negó a emitir una opinión sobre la elección que hará el Ejecutivo. “Las consideraciones que puede hacer el Gobierno corren por cuenta de ellos. Ninguna circunstancia puede modificar mi actuación como juez en el expediente“, sostuvo en referencia a su investigación sobre la presunta red de espionaje ilegal que lleva adelante desde su Juzgado en Dolores.
De 43 años, pasado radical y una reconocida actuación como abogado de derechos humanos, Ramos Padilla obtuvo el mejor puntaje en el concurso 348, por el examen escrito y por sus antecedentes académicos: 183,50 sobre 200.
Sin embargo fue señalado por su cercanía con la agrupación Justicia Legítima, algo que no niega, pero le resta importancia en su trayectoria judicial. “Defiendo mis valores. Prefiero que me reconozcan como abogado de Alfredo Bravo (ex diputado socialista ya fallecido e histórico dirigente de derechos humanos) o de (la fundadora de Abuelas de Plaza de Mayo) ‘Chicha’ Mariani”. Justamente por haberla acompañado a lo largo de muchos años desde La Plata en la búsqueda de su nieta Clara Anahí, secuestrada durante la dictadura, y por su vinculación con el Centro de ex Combatientes de Malvinas de esa ciudad, dijo “tener un vínculo especial” con la capital bonaerense cuyo Juzgado aspira a ocupar.
En diálogo con Infobae, también defendió su actuación en la investigación contra Lázaro Báez por el uso de facturas truchas, mientras subrogaba el Juzgado de Bahía Blanca. Sostuvo que estuvo solo seis meses en esa jurisdicción, y que ordenó una pericia al Cuerpo de Peritos Oficiales de la Corte Suprema sobre el material secuestrado, envió a juicio oral por narcotráfico a Juan Suris y le denegó la excarcelación.
Hijo del juez Juan Martín Ramos Padilla –conocido por sus tuits en los que vuelca sin filtro sus críticas a Macri y al Poder Judicial-, el magistrado de Dolores se ganó la animosidad del Gobierno a poco de que llegar a la Casa Rosada, cuando declaró la inconstitucionalidad del nombramiento por decreto de los jueces de la Corte Horacio Rosatti y Carlos Rosenkrantz.
El candidato del Gobierno
El candidato que sí contaría con el beneplácito del Ejecutivo es Durán, de 37 años, quien paradójicamente, siendo secretario judicial, había sido impulsado por la mayoría kirchnerista del Consejo para cubrir esa vacante a fines del 2014 en forma interina.
Durán subrogó ese Tribunal en las elecciones del 2015 -con una actuación que no fue objetada por los distintos sectores políticos-, hasta que la Corte falló en contra de su permanencia por no tener cargo de juez. Entre los consejeros le reconocen la experiencia en ese Juzgado Electoral.
Con menos chances quedó Di Lorenzo, de 50 años y perfil técnico, y quien según varios de los consultados en el Consejo fue el que tuvo uno de los desempeños más sólidos en la entrevista personal.
Desde noviembre del 2017, el Juzgado Federal No. 1 de La Plata está siendo subrogado por el juez de La Plata Adolfo Ziulu. Este magistrado es el que reclamó la competencia para investigar las irregularidades en los aportes que registró Cambiemos en las elecciones legislativas de 2017, cuando la investigación estaba en manos del juez federal de la Ciudad de Buenos Aires Sebastián Casanello, y en las del juez Federal Nº 3 de La Plata, Ernesto Kreplak, a quien vinculan a La Cámpora.
El consejo también aprobó una lista complementaria integrada por los postulantes Roberto Boico, abogado de Cristina Kirchner en la causa del Memorándum con Irán; Diego Isasa; Matías Latino; Andrés Salazar Lea Plaza; y Domingo Montanaro.