Una enorme ráfaga de aire helado que recubre en estos momentos el Medio Oeste de los EE.UU., se dirige al este del país, devorando una gran cantidad de récords de frío a su paso.
El Servicio Metereológico Nacional ha emitido ya varias alertas y pide mucha precaución a la población. Las temperaturas han descendido a sus mínimos en 25 años.
Ninguna persona en el área que haya nacido después de 1994, ha sentido un nivel de congelación de la magnitud de lo que se está viendo esta semana.
Según la CNN, 83 millones de estadounidenses, un 25% de la población, se enfrentarán a temperaturas bajo cero y algunos pueden llegar incluso a ver la caída de los termómetros hasta los -40F. Chicago estará más frío que algunas partes de la Antártida.