Padres de los alumnos de la Escuela 494 de Antofagasta de la Sierra denunciaron que sus hijos no podrán dar inicio al ciclo lectivo del periodo especial este lunes 22 de Agosto debido a las “pésimas condiciones edilicias” del establecimiento.
“No iniciarán el periodo lectivo de clases 2022/2023 por irresponsabilidad de las autoridades de educación y las autoridades departamentales, el intendente Julio Taritolay y su esposa, la senadora Norma Reales”, señalan en una carta abierta.
“Pasaron más de dos meses que los padres de familia de los niños presentamos una nota de pedido de mejoramiento del edificio escolar y no hicieron nada por cumplir”, señalan indignados, a la vez de acusar al jefe comunal de no prestar atención a su reclamo.
“El señor intendente prefiere seguir ampliando el parque automotor del municipio y de su empresa haciendo trabajar hasta los fines de semana a los empleados municipales en su casa particular que preocuparse por las necesidades del pueblo que le eligió”, denunciaron.
En ese marco, afirman que “los funcionarios tienen que estar al servicio del pueblo y no el pueblo al servicio de los funcionarios”, y cuestionan el adelantamiento de las clases –cuando históricamente el periodo va de Septiembre a Mayo-, recordando que el pasado 1° de junio elevaron un pedido en este sentido a la ministra de Educación, Andrea Centurión, sin respuestas.
Ahora, con la decisión tomada de adelantar el inicio del periodo de clases en la Puna catamarqueña, con escuelas ubicadas a más de 3.300 msnm, los padres expresan su malestar por el estado del edificio de la querida escuelita de la Villa. “Pedimos calefacción para todo el edificio escolar, ya que con las pocas estufas no se cubren las necesidades de las inclemencias climáticas”.
Además, reclaman nuevos sanitarios debido al aumento de la matrícula escolar y nombramiento de personal de servicios generales. “No podemos permitir que nuestros hijos vayan a clases con estas bajas temperaturas, sin aulas calefaccionadas, sin personal que limpie la escuela, sin personal que limpie para ellos, con solo dos baños para la gran cantidad de alumnos que son (más de 100)”, reclamaron.
La promesa de una supuesta visita por parte una empresa constructora contratada por el ministerio de Obras Civiles, -que tampoco cumplió con el acondicionamiento del edificio durante el receso-, no calmó a los padres que descreen de las acciones oficiales.
Y para completar su enojo, analizaron su realidad: “Antofagasta es el departamento más rico de la provincia en cuanto a minería y acá se vive carente de todo, en especial los servicios públicos, salud, educación, atención a las personas con necesidad de vivienda, entre otras cosas. El municipio que conduce Taritolay recibe muchos millones de Pesos del gobierno provincial y la obra pública no se ve. Estamos así, al descuido y al abandono total de las autoridades que nos representan”.
