El doctor Gustavo Mauvecin, presidente de la Sociedad Argentina de Medicina Hiperbárica, compartió sus opiniones sobre la implosión del submarino que exploraba los restos del Titanic en una entrevista con Radio Salta. Desde Madrid, España, el especialista recordó que la presión subacuática se calcula en un kilogramo por centímetro cuadrado.
“En mi opinión, la implosión ocurrió en cuestión de segundos y posiblemente se debió a la fatiga del material compuesto de fibra de carbono y titanio con el que se construyó el sumergible”, comentó.
El doctor Mauvecin es médico graduado de la Universidad de Buenos Aires (UBA) y completó cursos como Medicina Subaqua para Oficiales Médicos en la Escuela de Buceo de la Armada Argentina, así como el curso de Oficial Médico Subacuático y de Oficial Médico de Buceo de la Marina de los Estados Unidos.
Ha desempeñado roles importantes en el campo de la medicina subacuática, como Jefe de la División Medicina Subacua de la Base Naval Mar del Plata y Jefe del Centro Experimental de Medicina Subacua de la Escuela de Buceo de la Armada Argentina. Además, es socio fundador y actual presidente de la Sociedad Argentina de Medicina Hiperbárica y Actividades Subacuáticas. También es médico en la ex-Unidad Hiperbárica de la Clínica Colón de Mar del Plata y Director Médico del Centro de Medicina Hiperbárica de la misma ciudad. Actualmente, se desempeña como coordinador médico de Divers Alert Network y ha publicado varios trabajos de investigación, recibiendo cuatro premios principales por sus contribuciones.
En relación al incidente del submarino, el especialista señaló que la empresa que ofrecía el servicio realizaba viajes de manera experimental, lo que posiblemente explicaría por qué no se realizaron pruebas a nivel oficial o militar. Mauvecin destacó que el aspecto vulnerable fue el material utilizado en la construcción del sumergible.
El doctor Mauvecin recordó que el 70% de la superficie terrestre está cubierta por agua y que se conoce muy poco sobre las profundidades oceánicas, debido a la hostilidad del entorno. Mencionó la experiencia del director de cine James Cameron, quien fabricó un habitáculo para descender a 10.000 metros de profundidad y se inspiró en estas exploraciones para crear la fauna de la película “Avatar”.
Además, el especialista explicó que una implosión ocurre en milisegundos y mencionó que el Gobierno de los Estados Unidos ya había detectado la onda generada por el incidente del submarino.