La empresa tuvo que dar de baja varios servicios como resultado de la falta de tripulaciones certificadas. Paros y medidas de fuerza pasadas impidieron que los pilotos alcanzaran certificaciones obligatorias en simuladores y eso afecta a las operaciones.
Aerolíneas Argentinas canceló otros 15 vuelos de cabotaje este miércoles como resultado del conflicto sindical en la empresa, que se profundiza tras varias medidas de fuerza lideradas por los sindicatos aeronáuticos. Según fuentes de la empresa, hay 1.000 pasajeros afectados.
El largo conflicto impactó la renovación de licencias semestrales de los pilotos y eso hace que, pese a que no haya un paro nuevo de los tripulantes, las operaciones se vean damnificadas. El trámite faltante, que involucra prácticas de simuladores de vuelo en el Centro de Formación y Entrenamiento de Pilotos de la República Argentina (Cefepra) en Ezeiza, se ha visto interrumpido por protestas de los últimos meses, resultando en una falta de personal habilitado para operar rutas internacionales y de cabotaje.
Ante esta situación, Aerolíneas debió cancelar vuelos y reducir sus servicios al sustituir aviones de largo alcance por modelos más pequeños. Por caso, desde el jueves, la ruta a Miami, habitualmente realizada con aviones Airbus A330, se cubre con un avión Boeing 737 MAX, de menor tamaño y capacidad. No solo lleva menos pasajeros sino que debido a su menor autonomía, necesita hacer escalas para recargar combustible.
Los vuelos cancelados por el momento son:
– AR1512/13 Aeroparque-Jujuy-Aeroparque
– AR1882/83 Aeroparque-Ushuaia-Ezeiza
– AR1422/23 Aeroparque-Mendoza-Aeroparque
– AR1792/93 Ezeiza-Puerto Iguazú-Ezeiza
– AR1468/69 Aeroparque-Tucumán-Aeroparque
– AR1708/09 Aeroparque-Rosario-Aeroparque
– AR1460/61 Aeroparque-Santiago del Estero-Aeroparque
– AR1418/19 Aeroparque-Mendoza-Aeroparque
En detalle, el problema es el retraso en la renovación de licencias de los pilotos de largo alcance. Estas licencias deben actualizarse cada seis meses e implican prácticas en simuladores de vuelo, tarea que se realiza Cefepra, ubicado en Ezeiza. Pero los paros de la Asociación de Pilotos de Líneas Aéreas (APLA) en ese centro impidieron a varios pilotos cumplir los requisitos y renovar sus permisos.
APLA exige una recomposición salarial del 90% para compensar la inflación desde mayo de 2024 y plantea críticas hacia la gestión actual de Aerolíneas. En uno de sus comunicados, el sindicato señaló a Fabián Lombardo, gerente general, y a Juan Pablo Alvarado, subgerente, como responsables de “incumplimientos convencionales” que, según el gremio, agravaron la situación de la aerolínea. Entre las críticas también se menciona que la administración actual carece de la experiencia necesaria en la industria aeronáutica para resolver las demandas de los empleados y garantizar un servicio de calidad.
En este contexto es que el Gobierno impulsa con las aéreas privadas un plan de contingencia para contrarrestar los paros de la aerolínea de bandera. En la Secretaría de Transporte cuentan que ya se reunieron con al menos 4 líneas aéreas, cuyos nombres mantienen en reserva, “para repasar planes de incorporación de flota y posibilidades de operar más rutas de cabotaje, ya sea en condiciones normales o en situaciones de contingencia, como mayores problemas operativos por paros o medidas de fuerza en Aerolíneas Argentinas. Esto surgió cuando iba a renunciar Gustavo García Lemos, gerente de operaciones, por decisión del gremio; y se continúa planificando dado las cuestiones vistas ayer con el paro de 25 vuelos”.
En estos encuentros se les informa a las compañías las distintas desregulaciones en el sistema que fue llevando a cabo el Gobierno. “Estaba armado para beneficiar a Aerolíneas. Ahora, las empresas aéreas pueden operar rutas con facilidad, sin necesidad de instalarse en Argentina ni usar aviones con matrícula o tripulación nacional. Se suman también los beneficios que se otorgaron en Aeroparque, como por ejemplo el hecho que los aviones de otras aerolíneas puedan pernoctar en el aeropuerto”, sostienen.
Fuente / Infobae