Con un giro hacia posturas más conservadoras, el país se encamina a una segunda vuelta clave para su futuro político.
En un resultado histórico, Bolivia giró a la derecha tras 20 años de hegemonía de la izquierda. Con el 90,7% de las actas computadas, el Sistema de Resultados Electorales Preliminares (Sirepre) informó que Rodrigo Paz Pereira obtenía el 32,05% de los votos, seguido por el expresidente Jorge “Tuto” Quiroga con el 27%. Ambos se medirán en segunda vuelta el próximo 19 de octubre.
El empresario Samuel Doria Medina quedó tercero y rápidamente reconoció la derrota. “Cumplo mis compromisos. Si no entraba al balotaje iba a apoyar a quien llegaba primero si no era el MAS. Ese candidato es Rodrigo Paz y mantengo mi palabra”, afirmó en conferencia de prensa. La definición marcará un quiebre político en el país, donde por primera vez desde 2005 el oficialismo pierde la chance de gobernar.
Exdiputado, exalcalde y actual senador, Paz Pereira nació en 1967 en Santiago de Compostela durante el exilio de sus padres. Su padre es el expresidente Jaime Paz Zamora (1989-1993) y su madre, la española Carmen Pereira. Creció entre varios países por la persecución de los gobiernos militares.
Economista con estudios en relaciones internacionales, hizo carrera política en Tarija, donde fue alcalde entre 2015 y 2020 tras derrotar al Movimiento al Socialismo (MAS). También participó en 2019 en la Coordinadora de la Defensa de la Democracia, que denunció fraude en las elecciones de Evo Morales.
En esta campaña, con un despliegue mucho menor que sus rivales, se presentó por el Partido Demócrata Cristiano (PDC) junto al excapitán de Policía Edman “Capi” Lara, conocido en redes sociales por denunciar corrupción en la institución.
“Soy un hombre que tiene dos felicidades enormes, amar a la patria y amar a su familia”, dijo Paz Pereira a EFE. Prometió una agenda de mano dura contra la corrupción, reforma judicial, reducción de gastos superfluos y descentralización de recursos.
Si logra imponerse en segunda vuelta, el Senado quedaría bajo la presidencia de Lara, lo que obligará a Paz Pereira a construir consensos en el Congreso.
En estas elecciones se elegirá al nuevo presidente y vice que gobernará desde 2025 a 2030. También se renuevan los 130 integrantes de Diputados y los 36 del Senado.
Bolivia enfrenta hoy escasez de dólares y combustibles y una inflación interanual de casi el 25%, la mayor en 17 años. El MAS gobierna desde 2006, primero con Morales y luego con Luis Arce, hoy adversarios.
El organismo afirmó que la jornada de votación fue “tranquila”.
Se produjeron “incidentes aislados que no han alterado la votación”, dijo el presidente del Tribunal Supremo Electoral, Óscar Hessenteufel.
El mayor de ellos tuvo lugar en el Chapare, donde detonó una dinamita de mecha corta que no provocó daños personales ni materiales en los exteriores del colegio donde sufragó Andrónico Rodríguez, exaliado de Morales y de quien se distanció para postularse por una fuerza escindida del gobernante Movimiento al Socialismo (MAS).
Cuando Rodríguez emitió su voto fue agredido por un grupo de personas que le arrojaron piedras, lo que lo obligó a retirarse en medio de empujones y gritos.