Brasil: murió una mujer y dos hombres están graves por comer una planta tóxica

Las autoridades locales investigan cómo la familia pudo haber confundido la planta venenosa con una hortaliza comestible, lo que provocó una intoxicación masiva.

Una tragedia sacudió a la ciudad de Patrocínio, en el estado brasileño de Minas Gerais, donde una familia sufrió una grave intoxicación al consumir una planta venenosa creyendo que era acelga. Claviana Nunes da Silva (37), una de las víctimas, murió este lunes tras varios días internada en estado crítico.

La intoxicación afectó también a dos hombres de la familia. Uno de ellos, de 60 años, permanece grave, en coma inducido y conectado a un respirador. Los médicos esperan una respuesta positiva al nuevo tratamiento con antibióticos para intentar mejorar su cuadro infeccioso.

El otro hombre, de 64 años, fue extubado el sábado y se encuentra estable. El equipo médico evalúa darle el alta en los próximos días.

Una nena de 2 años también fue hospitalizada, pero solo por precaución, ya que no llegó a consumir la planta.

Todo ocurrió el miércoles pasado, cerca de las 15, cuando la familia almorzó en una quinta de la zona rural de Patrocínio. Poco después de la comida, Claviana y los tres hombres comenzaron a sentirse mal y fueron asistidos de urgencia por el Cuerpo de Bomberos, el Samu y la Policía Militar.

Las víctimas sufrieron paros cardiorrespiratorios, pero los rescatistas lograron reanimarlas en el lugar antes de trasladarlas a la Santa Casa de Patrocínio y a la Unidad de Pronto Atención (UPA).

La planta que provocó la intoxicación fue identificada como Nicotiana glauca, conocida popularmente como “Palán palán” o “Tabaco moro” en la Argentina.

La familia, que se había mudado recientemente a la quinta, la recolectó del terreno creyendo que era acelga y la sirvió salteada en el almuerzo.

Según la Secretaría de Salud, parte de la planta fue hallada en la boca de Claviana y enviada para análisis en la Fundación Ezequiel Dias, en Belo Horizonte.

La profesora Amanda Danuello, especialista en química de productos naturales de la Universidad Federal de Uberlândia, explicó al sitio g1 que la Nicotiana glauca tiene hojas más finas, textura aterciopelada y un color verde más vivo que la acelga. “La recomendación es no consumir nada de lo que no se tenga certeza de la procedencia”, advirtió.