El alcalde Eduardo Da Costa Paes decretó la situación de emergencia y recomendó a los habitantes permanecer en lugares seguros.
Al menos once personas fallecieron en la ciudad de Rio de Janeiro, y una permanece desaparecida, luego de las fuertes lluvias que afectaron ayer a esa ciudad brasileña.
Las precipitaciones alcanzaron, con especial fuerza, la zona norte de Rio y los municipios aledaños de la región metropolitana, donde se concentraron los decesos, fruto de los deslizamientos, ahogamientos y algunas electrocuciones.
“Una mujer, además, permanecía desaparecida”, informó la agencia AFP.
Los estragos causados por las lluvias llevaron al actual alcalde de la ciudad de Río de Janeiro, Eduardo Da Costa Paes, a decretar la “situación de emergencia”.
En tramos de la Avenida Brasil, una de las principales arterias de la ciudad, el agua acumulada llegó a superar el capó de automóviles.
Una decena de líneas de ómnibus no funcionaban y al menos cuatro estaciones de subterráneo debieron cerrar temporalmente debido a la acumulación de agua.
“Siguiendo orientación del presidente Lula, estamos actuando con el alcalde Paes para garantizar todo el apoyo del gobierno federal a la población alcanzada por las fuertes lluvias”, dijo Waldez Góes, ministro de Desarrollo Regional, en la red X.
El alcalde de Río recomendó a los habitantes que “permanezcan en sus casas o lugares seguros y eviten desplazarse para evitar entorpecer el trabajo de agentes públicos” y “poner en riesgo sus vidas”.
En tanto, el Centro Estatal de Monitoreo y Alerta de Desastres Naturales advirtió las últimas horas que “existe un riesgo muy grande” de deslizamientos en ocho municipios del estado de Rio.