Científicos del Departamento de Geografía y Ciencias Ambientales de la Universidad Queen Mary de Londres, en colaboración con HR Wallingford Ltd., desarrollaron un modelo que simula cómo el plástico flotante se desplaza desde la superficie de los océanos hasta el fondo marino.
Publicado en Philosophical Transactions of the Royal Society A, el estudio concluye que la degradación lenta de los plásticos y su interacción con la nieve marina —material orgánico pegajoso que transporta partículas al fondo— hacen que el proceso de eliminación sea extremadamente prolongado.
Un problema intergeneracional
La investigación muestra que, incluso si se detuviera hoy todo vertido de plástico, los fragmentos seguirían contaminando la superficie oceánica durante más de 100 años.
“La mayoría de los plásticos grandes y flotantes se degradan lentamente en la superficie, fragmentándose en partículas más pequeñas a lo largo de décadas”, explicó la Dra. Nan Wu, autora principal del estudio.
Estos microfragmentos pueden adherirse a la nieve marina y alcanzar el fondo, pero ese proceso es lento. Incluso después de un siglo, alrededor del 10% del plástico original aún permanecería en la superficie.
El misterio del “plástico desaparecido”
El modelo ayuda a explicar la discrepancia entre la cantidad de plástico que entra al océano y lo que se observa en la superficie, fenómeno conocido como el problema del “plástico desaparecido”.
“A medida que los plásticos grandes se fragmentan, se vuelven lo suficientemente pequeños como para hundirse”, señaló el profesor Andrew Manning, coautor del estudio.

La profesora Kate Spencer agregó que la contaminación por microplásticos es un problema intergeneracional, y que “nuestros nietos seguirán intentando limpiar nuestros océanos incluso si frenamos la contaminación plástica mañana”.
Impactos ecológicos y humanos
La contaminación plástica afecta todos los niveles del ecosistema marino:
. Daño físico: animales enredados en objetos plásticos.
. Ingestión: más de 700 especies marinas confunden plásticos con alimento.
. Mortalidad: más de 1 millón de aves y 100.000 mamíferos marinos mueren cada año por esta causa.
. Microplásticos: presentes desde la superficie hasta los sedimentos del fondo marino.
. Cadena alimentaria: los humanos pueden ingerir plásticos al consumir fauna marina contaminada.
Origen y proyecciones
. 80% del plástico proviene de actividades terrestres (ríos, desagües).
. 20% restante de plataformas petrolíferas y barcos.
. Fuentes específicas: colillas, bolsas, botellas, cosméticos, fibras sintéticas.
Si no se toman medidas, se estima que para 2025 podrían llegar 17,5 millones de toneladas de plástico al océano cada año, y para 2050 el peso del plástico podría superar al de todos los peces del mundo.
Soluciones y mitigación
La investigación subraya que la limpieza superficial no es suficiente. Se requiere una visión a largo plazo que combine acciones locales y globales:
. Reducción de residuos: evitar envases de un solo uso, usar bolsas reutilizables.
. Disposición adecuada: reciclar y separar correctamente los residuos.
. Elección de productos: evitar cosméticos con microplásticos y embalajes excesivos.
. Cambios industriales: fomentar una economía circular y responsable con los envases.
Además, el estudio advierte que el aumento de microplásticos podría saturar la bomba biológica del océano, interfiriendo con los ciclos biogeoquímicos y afectando la capacidad del océano para regular el carbono.




