Inspectores de la Municipalidad de la Capital clausuraron un local de venta de fiambres porque la propietaria no respetó el asilamiento obligatorio al regresar de una provincia en la que existen casos confirmados de coronavirus, La Rioja.
Tras un aviso a la policía sobre que la mujer no habría realizado el asilamiento en el período que establece la emergencia sanitaria para personas que regresan de un lugar con circulación del COVID-19, inspectores de la comuna capitalina debieron intervenir para preservar la salubridad de las personas que concurren a realizar la compra de alimentos y de los mismos empleados que prestan servicio en el comercio.
Al llegar a Catamarca, la propietaria de la cadena de fiambrerías habría asistido inmediatamente a uno de los locales a realizar las tareas de cobranza en el local de avenida Alem. Luego de la clausura preventiva intervino la Fiscalía Federal.
Desde hace días que la situación circula en redes sociales, generando el malestar de clientes y personas que consideran irresponsable el accionar de la mujer.
Consultado al respecto, José Malki, director de Inspección General, explicó: “Nosotros no sabemos cómo es el estado de salubridad de la persona al volver de otra provincia, entonces ante eso tenemos que hacer la clausura, hasta que las autoridades de Salud de la Provincia nos informen cuál es el estado de la salud, dado que la personas estaban dentro del local comercial y éste es muy concurrido. Ante esta situación, desde la Municipalidad, ante el aviso de la policía, que nos dice que esta persona había venido de otra provincia y no se había hecho ningún tipo de control, que había pasado controles sin hacerse ninguno, debemos hacer la clausura, porque no sabemos si esta persona tiene alguna afección o no”.
Controles
Personal de Inspección de la comuna realiza diariamente operativos de control en locales comerciales. En los procedimientos verifican el estado de los alimentos que se encuentran a la venta y a la vez verifican el cumplimiento de las normas establecidas por la emergencia sanitaria, entre ellas la distancia de dos metros entre personas en la fila de espera, el suministro de elementos de higiene al ingreso y las condiciones de seguridad y salubridad en el funcionamiento del comercio.